martes, 23 de abril de 2013

Algunos patrones de camuflaje en Infinity

Uno de los elementos mas complicados aparentemente a la hora de pintar determinadas miniaturas de Infinity es enfrentarse al reto (que, una vez que entremos en materia veremos que no tiene ninguna dificultad) de pintar camuflajes en las miniaturas. Si estamos pintando miniaturas de Ariadna, es obligado meterse en faena.



Aunque existen multitud de patrones documentados y que podéis seguir como guía para vuestras miniaturas, también tiene su gracia inventarse o adaptar camuflajes a las miniaturas. Yo personalmente no trato de copiar exactamente los patrones de camuflaje que me gustan, sé que hay gente que le encanta el rigor histórico, pero yo prefiero tomarme esto como un ejercicio artístico.

Uno de los patrones quemas me han gustado y mas bonitos me han parecido lo descubrí hace muchos años en el viejo foro de Inifnity (allá por el 2006-2007), dónde el forero Sir Alban publicó una fotografía de una francotiradora cosaca cubierta con un manto pintado de forma similar al plumaje de las lechuzas en invierno:

Detalle del camuflaje de la francotiradora de Sir Alban, podeis
ver mas figuras suyas en sus hilos de Lead Adventure.


Al final terminé por copiarle el concepto, aunque variando los colores, sobre este Moblot:


Pinté el camuflaje sólo sobre la armadura corporal que lleva el soldado para protegerse. El resto del uniforme está pintado en gris.

Un intento de aunar el camuflaje propio de zonas áridas con el nival me llevó a intentar un patrón basado en blancos y marrones sobre este Veteran Kazak:

Este patrón está pintado con una capa base de carne (Carne Bronceada de GW), ligeramente iluminada con Amarillo Desierto (de Vallejo GC. Este color también es el color base del uniforme y de otros elementos textiles). Sobre este color se pintaron manchas irregulares blancas y marrones (Blanco Hueso y Marrón Bichos, ambos de Vallejo GC), dejando que predominen las primeras.

Tras el veterano apliqué un concepto similar a un Scout, intentando combinar los colores marrones y amarillos con verdes apagados y blancos. Este esquema sigue un patrón mas clásico, pero tras haberla pintado creo que el conjunto (camuflajes terrosos mezclados con blancos y verdes) no es tan adecuado.

Otros camuflajes muy interesantes y fáciles de ejecutar son los dos siguientes que os presento: Por un lado el camuflaje verde y marrón oscuro no es mas que un patrón aleatorio de manchas de Marrón Quemado (GW) sobre una miniatura previamente pintada con Verde Ángeles Oscuros (GW) e iluminada con Verde Goblin (GW) y Verde Ángeles Oscuros mezclados. Como camuflaje apto para junglas y zonas densas de vegetación es uno de los mas conseguidos.

El camuflaje S.A.S. lo pinté haciendo un pequeño homenaje a los colores que empleaban las tropas británicas durante la segunda guerra mundial: Sobre un fondo Khaki (Khaki de Vallejo Game C. y Amarillo Desierto de Vallejo Game C.) pinté rayas y manchas verdes (Camuflaje Verde Oliva Vallejo GC) y marrones (Marrón Bichos, Vallejo GC). También el chaleco verde es muy adecuado para camuflajes, ya que el verde militar es un color con una saturación muy baja, pudiéndose iluminarse, como en este caso, con una mezcla de Camuflaje Verde Oliva (Vallejo GC) con Gris Códex (GW).

Por último, sólo presentaros algunos ejemplos mas de camuflajes que, bien son tan simples que apenas merecen explicación, bien son modificaciones y variaciones de los presentados previamente.


De todas formas, y ya para terminar, mi recomendación siempre es, para pintar camuflajes de juegos de ciencia ficción, mirar unos cuantos patrones, escoger alguno que sea interesante y hacer una versión mas o menos libre del mismo, entre otros motivos, por que no es lo mismo pintar un camuflaje sobre una camiseta de tela que sobre una miniatura de 28mm de altura.

martes, 16 de abril de 2013

Toku Koda, Duelista del Clan Mono

Hace unos años que comenzamos a jugar en un grupo de amigos al juego de rol La Leyenda de los 5 Anillos, un juego ambientado en una tierra oriental que es una amalgama de la cultura japonesa y china. Al principio no era una ambientación que me atrajera, pero descubrimos que la mecánica del juego era sencilla y fácil de aprender. Con el tiempo fuimos jugando diversas historias en las que varios eran los directores de juego, no obstante una de las campañas que mas me han gustado es en la que participó el personaje al que le dedico una miniatura y la entrada de hoy:



Toku fue un ronin que alcanzó el rango de Capitán Imperial y Héroe del Imperio Rokuganés. Sus valores, la virtud, la defensa de los mas débiles y la lucha por un Rokugan en armonía son la gran herencia que Toku dejó a sus descendientes, las familias Toku y Fuzake, que integran el modesto Clan del Mono.
A pesar de enarbolar tan altas virtudes, los miembros del clan son vistos por los demás clanes con vehemencia y en determinados asuntos políticos son casi ignorados. No obstante muchos son los miembros del clan que desarrollan su carrera como Magistrados Imperiales, haciendo de las virtudes de Toku un modelo en el que los demás samuráis pueden verse inspirados.

La jurisdicción de los magistrados Mono es la que los clanes mayores no quieren asumir; es decir, el Magistrado Imperial del Clan Mono sólo tiene poder real en aquellas zonas intermedias entre territorios de clanes, lo que implica que los tratados de anexión y cesión de tierras entre los grandes clanes afectan
directamente al área en que se desenvuelve el Clan Mono.


Las ropas de Koda son marrones, como  las
que usan la mayoría de los miembros del clan.

Toku Koda aspiraba de niño a convertirse en un Magistrado Imperial, ya que su padre Toku Ishiro desempeñaba dicho cargo en las zonas de frontera de los territorios de los clanes Grulla y Escorpión. Su infancia la pasó junto con su familia, viajando cada pocos años de pueblo en pueblo, donde los asuntos de la magistratura requerían la presencia de su padre.

Tras haber superado su instrucción en la escuela de Bushido, su determinación de ejercer en la magistratura ha vuelto a dirigir sus aspiraciones. Sus habilidades en el duelo le ha proporcionado a Koda cierto renombre en los territorios en los que visita. Sumado a su participación en la defensa de la muralla que separa Rokugán de Las Tierras Sombrías durante un asedio demoníaco, le han convertido en un valioso perseguidor de la corrupción que amenaza al Imperio.

Koda porta una katana cuya empuñadura de jade está trabajada con figuras de jabalíes, cómo símbolo de victoria en
uno de los muchos duelos en los que ha participado. Bueno, ya se que la katana no tiene nada de lo que digo, pero es
un detalle sin importancia...
Decidí buscarme una miniatura por que en las partidas de este juego siempre terminábamos marcando nuestras posiciones con fichas sobre un tablero hexagonal. Cada jugador disponía de algunos marcadores personalizados con su personaje, pero yo no contaba con ninguno de un tipo acorde con Koda. Busqué durante algún tiempo miniaturas de samurais sin armadura, pero hasta hace unos años era una tarea difícil  sobre todo si se necesitaba una miniatura sola. La miniatura que terminó por convencerme es la de un samurai de la marca Reaper, que fue transformada con masilla para añadirle detalles, como la banda de tela que le cubre los hombros, una coraza y algunos objetos como una calabaza al cinto y algunos víveres, como un nómada acostumbraría a llevar.

Por último pinté la peana de un color azul grisaceo, para que contrastara con las ropas del samurai. Quizás es dificil imaginarse un suelo con estas coloraciones, pero no hay que olvidar que la historia de este personaje está ambientada en un mundo en el que existe un infierno en la tierra, y podemos imaginar que las áridas tierras sombrías tengan estos tonos.

martes, 9 de abril de 2013

Asesino Imperial

La enorme extension del Imperio hace que los gobiernos planetarios frecuentemente esten aislados, a menudo durante siglos. La administración imperial puede, eventualmente, recolectar las tasas y los impuestos sólo cada diez o veinte años. Esto es a veces imposible a causa de las tormentas disformes o por otros asuntos mas mundanos como son las comunes guerras y rebeliones que se dan a lo largo del Imperio, así como las ocasionales invasiones alienígenas a gran escala. De hecho, un Gobernador Planetario puede llegar a pensar que su gobierno puede seguir progresando de manera autónoma y sin la protección de Imperio.

Hay varios modos de hacer volver a los planetas bajo el yugo imperial. La guerra total es un método , el exterminatus otro. Si el mundo Imperial que se ha de volver al redil, es un mundo estrategico y cotizado, puede ser benéficioso, a veces, buscar medios diplomáticos. Si el planeta puede ser sometido al Imperio por maniobras hábiles y diplomáticas, una guerra costosa, fastidiosa y destructora podrá ser evitada. Existen agentes imperiales perfectamente preparados en el arte de la diplomacia incluida en su parte mas oscura: corrupción, agitación, sabotaje económico, terrorismo, tortura, homicidio y asesinato.

Los asesinos están entre los más útiles de estos agentes diplomáticos. Su trabajo es simple, eliminar a personajes claves de la oposición. A veces, una rebelión esta centrada alrededor de un solo individuo y un planeta puede ser tomado sin baños de sangre por la muerte de un personaje concreto o su desaparición. Si es hecho con discreccion y habilidad, un jefe rebelde puede ser eliminado, cortando una rebelión de raíz.

Los asesinos son reclutados en mundos primitivos cuando son niños y pasan diez años intensivos de entrenamiento en la Escuela de los Asesinos (el Officio Assassinorum) de Terra dónde continúan viviendo y entrenandose. 

Allí, los futuros asesinos reciben implantes cibernéticos y biotecnológicos para aumentar sus sentidos y sus reflejos así como para hacerles fuertes, agiles y capaces de sobrevivir a las misiones que han de realizar.

Cada asesino debe dominar todo armamento y equipo a su disposición, debe saber cómo conducir y mantener toda suerte suerte de vehículos, desde una motocicleta a una astronave, debe ser un experto tecnológico y poseer un conocimiento enciclopédico de la historia, la organización y las lenguas del Imperio. Han de estar muy por encima de la media ya un así muchos no sobrevivien al entrenamiento. Otros mueren en los quirófanos cuando sus cuerpos no aguantan los cambios y otros quedan lisiados o son desechados al poco de iniciarse los entrenamientos si sus instructores no los ven capaces de llegar al final.




Esta miniatura corresponde a uno de los primeros asesinos modelados por Citadel Miniatures. En concreto es uno de los dos asesinos de la época del Rogue Trader (Warhammer 40.000 1ª edición) y fue puesta a la venta en 1987.


La obtuve de segunda mano hace algo mas de 6 años, y todavía se puede encontrar de algunas tiendas o algunos coleccionistas. Su equipo no se corresponde con ninguno de los perfiles que permiten su inclusión en las partidas de Warhammer 40.000, pero se trata de una miniatura clásica y que no pretendía modificar, ya que la pinté por el placer de tenerla pintada y ocasionalmente, poder incluirla en alguna partida.

Esto es todo por ahora. Próximamente mas agentes del Imperio...

martes, 2 de abril de 2013

Ludus Gladiatorum I: Retiarius et Secutor



Cartel que anuncia el enfrentamiento entre Astianax el secutor y Kalendio el retiario en nuestro particular  combate de gladiadores. Era común que los grandes juegos se anunciaran con pintadas en las paredes hechas por pintores profesionales, llamadas edictum, para que el público tuviese a mano toda la información. También se conservan graffitis hechos por los fans, recreaciones de los grandes combates.  

El retiario alardeaba de su agilidad. Dando pequeños saltos, giraba alrededor de nuestro secutor sin dejar que este le arrebatara la distancia que lo mantenía seguro. Su única preocupación era mantener también una distancia considerable entre Astianax, su espada y la barrera del podio. De vez en cuando agitaba la red plomada para que golpease en el scutum, pues de esa manera hacía mella en el avance implacable del secutor. Un giro de pantomima, y dejándose llevar por el impulso de la red, lanzó un golpe sin consecuencias con su tridente hacia el borde superior del escudo de Astianax.

Plano del anfiteatro de la ciudad  romana de Segóbriga, en Cuenca. Allí es donde hemos ambientado esta ficticia pelea. Evidentemente, no seguimos rigor histórico en cuanto a los nombres de los personajes ni su ubicación, sino que buscamos que la historia sea más o menos creíble.
En el anfiteatro, del siglo II, se llevaban a cabo espectáculos de caza (venationes) y peleas de gladiadores. Tenía capacidad para unas 6000 personas. Actualmente se encuentra en fase de acondicionamiento. 

A Urbano Maius Martialis se le acaba la paciencia. La munera gladiatoria va bien, pero ha gastado mucho dinero en estos juegos que deben servirle para que la plebe de Segóbriga le elija como edile, y estos dos fantoches lo único que hacen es fingir. Llevan bailando diez minutos. Vale que es la tercera vez que se enfrentan, que ambos llevan más de una decena de combates que han sido memorables, que son veteranos; que el anfiteatro se ha llenado de gente enfervorizada y que las apuestas están que revientan a favor de Kalendio el retiario. A una discreta señal suya, aparece un brasero con carbones encendidos sobre la barrera de madera que está situada delante del podio. Un juez con una máscara de Caronte saca de las ascuas un hierro candente y se dirige con él hacia Kalendio y Astianax. Ascuas para esos dos cabrones y vino y manzanas para el populacho.

Entre los asistentes hay una veintena de soldados. Los legionarios han escoltado un pago para las minas de lapis specularis que hay por todo el municipio. Van siguiendo el combate con toda  atención, poniendo glosa a todas y cada una de las acciones de los contendientes. Se han dado cuenta de que Astianax se reserva. Es mayor y pesa más que Kalendio, y tiene que aguardar su oportunidad.  Comentan que no cae en la trampa de intentar atrapar al retiario. También se han dado cuenta de que cojea ligeramente de la pierna derecha. Marco Sexto Longinus, el decurión, afirma que Astianax era zurdo, y que ha tenido que cambiar el estilo de lucha por esa lesión. Entre trago y trago de vino, los compañeros de Marco Sexto le dicen que está más tonto que su cipote por haber apostado por un cojo. De repente, ven al retiario hacer un alarde con la red y el tridente. Servilio, uno de los legionarios más jóvenes, lanza su almohadilla contra Kalendio llamándole "zorra impúdica".


Mario Sempronio está sentado en la grada, en la media cavea. Acaba de comprar unos torreznos en un puesto, abajo, junto a la puerta libitinensis. Son los mejores, pero este año se les ha ido la mano con los precios. Ha decidido que era necesario estar preparado para presenciar el combate de la década. No es común que unos gladiadores procedentes de la urbe lleguen hasta Segóbriga. Cierto que es una ciudad bendecida por Augusto, pero las cosas ya no son como en tiempos de su abuelo. Ver a estos dos gladiadores es todo un privilegio. Gracias a unas monedas que ha gastado en agradar a uno de los locarii, ha conseguido una entrada a buen  precio, un  sitio fantástico en el centro del lado longitudinal del anfiteatro. Hace un instante, acaba de ver como el retiarius, por el que ha apostado, ha lanzado un furibundo ataque que casi arranca el escudo al secutor. El vello se le ha erizado. Tiene que ser fantástico saber luchar así... Pero muy peligroso.


Astianax ha reaccionado. No hay que olvidar que tiene orgullo de veterano, y duda si la almohadilla iba dirigida a él, o al pesado de su incansable adversario. Golpea con el escudo la red hacia la izquierda, y logra desequilibrar al retiario, que se ve impelido por una enorme fuerza hacia los tablones. Alguien ha retirado el brasero, y esto permite a Kalendio girar sobre sí mismo e intentar clavar el tridente en el gemelo del secutor conforme avanza. Se da cuenta de que ha fallado cuando el enorme escudo lo aplasta. Tiene el tiempo suficiente para escurrirse hacia la derecha, y coger distancia. Se oyen algunos abucheos entre el público, pero él, dramatizando, se seca el sudor de la frente con la manica enguatada del brazo izquierdo. Después, saca la daga de su cinturón. Está preparado para el acto final. La cosa se pone seria, pues el bueno de Astianax no va a dejar que la partida quede en tablas. Ir a morir a Segóbriga.... El público se tensa y ruge.

Apunte del secutor o contrarretiario Astianax. Fuertemente armado con una espada corta (gladio) en la derecha y un escudo grande (scutum) en la izquieda. Su protección la completa un yelmo sin alardes para que no se enganche con la red del retiario, una mánica metálica que le cubre todo el brazo del arma, y una ocrea de bronce en la pierna izquierda.  El peso del equipo podía superar los quince kilos. 


Kalendio debe aprovechar la frescura de sus piernas, ahora que todavía la tiene. Salta hacia Astianax lanzando el tridente hacia el visor de su yelmo, pero es sólo una maniobra de distracción, pues deja que el arma llegue a su máxima distancia asiéndolo por la parte final del ástil. A continuación, se arroja al suelo, y, mientras el secutor lanza un par de tajos al aire, lanza su red a ras de la arena para atrapar las piernas de Astianax. El público ruge, ¿el pez ha caído en la red? No, el secutor ha esquivado su maniobra, y avanza, regateando el tridente sin fuerza, hacia la espalda de Kalendio para clavarle el gladius y acabar el combate.
Con una agilidad sobrehumana, el retiario se impulsa con su pierna izquierda sobre el scutum de su rival, volteando sobre sí mismo y quedando de pie. En la maniobra ha perdido el tridente, pero tiene al secutor donde quería. El contrarretiario es alcanzado por la red, que le inutiliza el brazo del escudo y lo envuelve como una túnica de muerte. La multitud segobrigense se pone en pie.


Apunte del retiario Kalendio. Es el más especial de los gladiadores, y su armamento  difiere de prácticamente el resto de tipos de gladiador. Lleva una red plomada en la mano derecha, cuyo brazo va libre para poder lanzarla mejor. La red va unida a su muñeca por una cuerda que sirve para cerrar la red. En la mano izquierda lleva un tridente. Ese brazo va protegido por una manica hecha de cinchas y una fascina de bronce que le protege el hombro, cuello y nuca del lado izquierdo.  Va equipado, además, con una daga, que le servía para desembarazarse de la red y para ajusticiar al rival vencido, cosa para la que no servía el tridente. 
Los gladiadores Astianax y Kalendio, izquierda y derecha respectivamente.

La élite por fin se está dejando llevar por la dinámica del combate. La mujer de Urbano ha amagado dos veces con retirarse, sobrecogida y acongojada con la violencia exhibida. Todos saben que ha apostado por el secutor a través de su esclavo de confianza, un lusitano que, endeudado por el juego, ahora vive a costa de hacer sisa a las apuestas de su domina.

El gladiador Astianax, secutor.  Como característica más distintiva lleva un yelmo de bronce  pulido y  plateado.


Astianax avanza como un caballo desbocado hacia Kalendio, comiéndole el terreno, empujando con todo, red incluida, y lanza una punzada terrible hacia el mentón del retiario, que, sorprendido, apenas puede apartarse. Mientras cae hacia atrás, se da cuenta de que si no corta cuerda que une la red a la muñeca, está perdido. Como un buen profesional, lanza un tajo con la daga que aún tiene en su mano izquierda, y corta el cordón letal que lo mantiene unido a la red.

Kalendio  el retiario posando para nosotros. Pelea a cara descubierta y destaca su tridente pintado y decorado con cintas y su llamativo calzón azul. 

Kalendio ha caído. Astianax ha estado a punto de tropezar y caer indefenso en las manos del retiario diez veces en diez pasos. Eso azuza su sangre. Ya no hay distancia, no hay pensamiento, todo es automático. Cae como un rayo fulminante, y gracias a Némesis, su rodilla y el bronce de su ocrea encuentran el pecho del pescador, del que escapa aire y un ruido de corteza rota. Es un demonio en una red, que ahora tiene el combate ganado. El retiario alza su dedos indice y corazón hacia el palco de la puerta triumphalis. Ahora todo depende de la voluntad del pueblo y del editor. ¿Pollice verso?

M. A. N.
Nº de inventario: 3.600.
Mármol y caliza
Dimensiones: Alt.58 cm.; Anch. 58 cm.
Procedencia: Roma
Cronología: Siglo III

Las figuras que ilustran esta entrada son de Crusader Miniatures. Durante mucho tiempo, Crusader y Wargames Foundry eran las dos marcas que mayor gama de gladiadores tenían a disposición del público.  Aunque la calidad es inferior, Crusader supera a Foundry en relación calidad-precio. Además, la configuración de miniaturas por blister de Foundry hace que pagues por miniaturas que no vas a usar, como los gladiadores enanos.

La calidad de los gladiadores de Crusader ha quedado desfasada. Los modelos son antiguos, y su modelado cumple bien con lo que representa, pero se han quedado fuera de juego con respecto a los niveles de calidad actuales. Eso sí, siguen siendo bonitas, agradecidas y asequibles.

Están pintadas con una base de imprimación negra, y después se han ido trabajando todas las capas, de la más inferior, la piel, hacia la superior, la armadura y las armas. Lo que se ha intentado obtener con el pintado es tener unas figuras más que dignas para jugar, pero sin forzar ningún alarde que sea irreparable. Hay que tener en cuenta que las miniaturas de los gladiadores van a estar sometidas a un gran desgaste por transporte y el propio toque de nuestros dedos. El barniz, que no se le ha dado todavía, será el barniz mate de Vallejo Game Color. La pintura de las armaduras se ha utilizado una técnica básica al pintar los metálicos sobre negro con un bronce puro de Vallejo Game Color y un Brass de Model Color. También se ha dado color Acero Natural de Vallejo Model Color sobre el bronce, para asemejar la técnica de "bronce plateado" que se usaba en las armaduras. Su brillo llamativo viene a representar que los gladiadores aparecían con sus armaduras impolutas a la arena, y era por ellas por las que eran claramente identificables. Sólo a los retiarios y sus derivaciones se les veía la cara completamente.

Uno de los proyectos que barajamos es hacer un anfiteatro, del que ya tenemos decididos una serie de elementos construictivos, y estamos probando sistemas de juego ambientados en el mundo de los gladiadores. Personalmente, el juego de Warhammer Histórical (ya desaparecido) llamado Gladiator me parece incompleto y flojo, así que lo he descartado. Actualmente estamos probando un juego mezcla de wargame y juego de mesa, el Ludus Gladiatorius, y aunque sus componentes son bastante nefastos, tiene un buen sistema y cinco figuras de metal prepintadas que cumplen. Iron Ivan Games va a lanzar en breve otro que parece interesante por su descripción.

Nada más, en próximas entregas iremos viendo cómo les va a los gladiadores de nuestro ludus, según le cunda al lanista pintar a sus muchachos. Narraremos una partida de Ludus Gladiatorius, y sabremos cómo  acabó la historia.  Saludos a todos.