martes, 14 de enero de 2025

Vigilantes de hierro y latón

"Dicen que tras los muros del recinto se oye el crujir de pisadas..." sentenció seriamente Tobb alrededor de la hoguera.

"Tonterías de mediano bocazas" Gruñó Thornakk. "Nadie vivo puede entrar tras esos muros. De lo contrario ya habrían saqueado el palacio."

Tobb le dedicó un grosero gesto con sus dedos de ladrón. Tan rápido, que sólo los ojos del Gnomo Telefunken pudieron percatarse. Telefunken rió mientras Tobb prosiguió con su relato: "Ciertamente, nadie vivo puede entrar ni salir, pero convendrás, mi buen amigo, que no sólo hay vivos entre las ruinas de Felstad. Cuentan los mercenarios del Ojo de Halcón que gigantes autómatas metálicos protegen los jardines del lugar. Uno incluso asegura que llevan poderosas ballestas en lo que deberían ser sus manos."

Grundig se cubrió con su capa tras escuchar al mediano. Tenía más frío del normal esta noche en la taberna desvencijada que les servía de guarida. El había oído también esas historias de las bocas apestosas de alcohol de los mercenarios humanos que sobrevivían a las escaramuzas en la ciudad helada, y que volvían a las ventas cercanas para gastarse la escasa paga en lujos mundanos. Grundig nunca daba mucho crédito a esas historias, la mayoría inventadas para caerles bien a los parroquianos y sacarles algún trago, pero un viejo guardaespaldas le relató el infierno que vivió contra los engendros mecánicos que protegían el sitio.

Grundig terminó su ración del oscuro brebaje a base de carne seca y helechos que les mantenía con vida y se retiró a dormir antes de que le tocara el turno de guardia. Mañana sería otro día... quien sabe, igual hasta se acercaban a ver si esas historias tenían fundamento o sólo eran cuentos para asustar a los niños y a los gnomos.

 

Hola de nuevo a todos al blog de Freakland Scenics, volvemos en 2025. Quién diría hace más de diez años que todavía seguiríamos publicando entradas. Sinceramente ni yo mismo. Esta semana quería hacer una pequeña presentación de dos miniaturas reconvertidas en constructos armados con ballestas, pensados para representar los autómatas nombrados como "Ballista II" que aparecen en el suplemento de Frostgrave: Perilous Dark.

 


Vamos al tema. Seguramente habréis descubierto que se trata de la enésima transformación de los Sigmaritas de Warhammer. En mi caso quería, como he comentado, utilizarlos como base para constructos de Frostgrave, y creo que tienen todo el aspecto de viejos autómatas. Les cambié un brazo con un martillo (bastante horroroso) por una ballesta, a la que le puse un carcaj a modo de cargador automático (o algo por el estilo). No olvidemos que esto sí que "lo hizo un mago".

 



 

El original es una miniatura bastante interesante, pero, sinceramente, de precio elevado para lo que debería representar, más aun teniendo en cuenta que en los escenarios de Perilous Dark las Ballistas II no aparecen solas, si no que son dos las que guardan las puertas de las profundidades. Ni que decir que las figuras anteriores costaron menos de un euro, gracias a las promociones coleccionables de Warhammer.


Como siempre, espero veros pronto de nuevo por aquí. ¡Salud!

 

De nuevo el siniestro hombre con fez, frecuentando extrañas compañías. Mejor no preguntamos.